Cuentos, analogías y metáforas

“ Se puede mostrar que la mayoría de las teorías de las ciencias sociales surgieron de la sabiduría popular ordinaria. Las concepciones científicas son sólo más formalizadas y están sujetas a diferentes clases de pruebas que las nociones utilizadas en la vida diaria. Escuchar también significa comprender el lenguaje en el cual surgen estas nociones cotidianas y comprender las prácticas de la comunicación en las cuales ellas están inmersas.”
Klaus Krippendorff

Durante siglos, los relatos y metáforas han sido utilizados para transmitir mensajes. Los libros religiosos incluyen un gran número de analogías, metáforas e historias, como en el caso de las paradojas o relatos del budismo zen o las parábolas de la Biblia. Todos ellos nos transmiten enseñanzas de una forma indirecta o transforman las ideas difíciles de entender en conceptos inteligibles. A lo largo de los siglos, los hombres y las mujeres sabios se han servido de las metáforas y los relatos para responder a las preguntas o explicar las cuestiones de difícil comprensión. Formaban parte de una cultura oral en la que los ancianos disfrutaban contando historias y compartiendo sus conocimientos. La mayoria de los relatos llevaban implícita una lección para los jóvenes, también se utilizaban para enseñarles las costumbres y las normas sociales.
Como afirma Sebastián Vázquez: “Los relatos son portadores de un mensaje que pretende proporcionar al que los lee o escucha una oportunidad de acceder a un estado de comprensión más amplio que incluye tanto los elementos simbólicos como los recursos fantásticos y paradójicos. Relatos que, en apariencia muestran una obvia simplicidad o una sencilla belleza, esconden una segunda lectura que el observador atento, no dejará de percibir y valorar.” Así los maestros chinos comparaban los cuentos con cierto tipo de miniaturas: una primera visión permitía percibir un hermoso paisaje, pero un acercamiento más cuidadoso dejaba ver detalles hasta entonces invisibles Además el relato, como la metáfora, posee un halo misterioso que los hace irresistibles, en palabras de Tony de Mello”: Es posible que la primera reacción de los seres humanos ante la verdad sea una reacción de hostilidad y rechazo. Por eso los Grandes Maestros, como Buda y Jesús, idearon un recurso para eludir la oposición de sus oyentes. Sabían que las palabras más cautivadoras que posee el lenguaje son: “Erase una vez...”; y sabían también que es frecuente oponerse a una verdad, pero que es imposible resistirse a un buen relato.” Vyasa, el autor del <>, dice que, si escuchas con atención un relato, nunca volverás a ser el mismo, porque el relato se introducirá en tu corazón y, como si fuera un gusano, acabará royendo todos los obstáculos que se oponen a la comprensión de la verdad que esconden.
Las metáforas y los relatos también se utilizan para resolver problemas. Carl Jung trató de cerrar la brecha entre Occidente y Oriente con su obra <>, este libro proporciona una comprensión holistica del género humano. Jung afirma que la conciencia humana es unitaria, asi las diferentes etnias usan símbolos parecidos o incluso idénticos para representar los diferentes aspectos de la vida. La definición de Jung de lo simbólico es la siguiente: “Una palabra o una imagen es simbólica cuando implica algo más que su significado obvio e inmediato. Tiene un aspecto inconsciente más amplio que nunca es definido con precisión o explicado por completo. Nadie puede pretender definirlo o explicarlo. Y cuando la mente trata de explorar el significado del símbolo, se encuentra con ideas que están fuera del alcance de la razón” Jung creía que la principal función del símbolo era describir los arquetipos o imágenes primigenias, serían lo heredado que reflejaría el inconsciente colectivo. Se corresponden con experiencias tales como asumir la muerte, y se manifiestan simbólicamente en las religiones, los mitos, los cuentos, las metáforas y los sueños. Kopp, un psicólogo que ha estudiado la importancia de las metáforas en la psique humana afirma: “Comprender el mundo metafóricamente significa que, al ser capaces de captar intuitivamente las situaciones, nos abrimos a las dimensiones simbólicas de la experiencia, aceptando los multiples significados que pueden coexistir, considerados como matices unos de otros.” Creiá que las metáforas tienen la capacidad de ampliar e incluso suplantar los procesos racionales y empíricos. Rossi, también psicólogo, explica como funcionan las metáforas, centrándose en las diferentes funciones que desempeñan el hemisferio izquierdo y derecho del cerebro. Indicó que, dado que el ser humano expresa sus problemas a través del hemisferio derecho, la metáfora “puede ser un medio de comunicarse directamente con el hemisferio derecho en su propio lenguaje.” Esto puede deberse a que la metáfora requiere un procesamiento en paralelo en el que se tiene en cuenta a la misma vez la estructura superficial y profunda de lo que se quiere aprehender.